Mantienen caliente nuestro hogar en invierno, están en todas las viviendas y su mantenimiento es pequeño. Aunque apenas les prestamos atención, los radiadores son una parte primordial de nuestra casa, por eso es recomendable conocer todas sus partes. En esta ocasión vamos a hablar del detentor. Un pequeño aparato cuya funcionalidad es más importante de lo que creemos.
El detentor es una válvula que regula la salida del agua del radiador que normalmente se sitúa en uno de sus extremos inferiores.
Esta pieza tiene como función principal cerrar el flujo de agua al radiador durante trabajos de mantenimiento, obras o al sustituirlo. Es una pieza que no tiene muchos años, por lo que si tu calefacción central es antigua, seguramente carezcas de detentor.
¿Para qué sirve el detentor?
La principal ventaja de contar con detentores en los radiadores de tu hogar es que permite aislarlos de la calefacción central ante cualquier incidencia, evitando ocasionar molestias al resto de vecinos.
De esta manera, si se te estropea un radiador o quieres cambiarlo de ubicación si no contamos con detentor, aunque cortemos la llave de entrada, el agua seguirá fluyendo desde el retorno por lo que será necesario vaciar la instalación un nivel inferior al piso en cuestión. Esta opción ocasiona problemas a los vecinos y debes conseguir el pertinente permiso de la comunidad.
En cambio, con un detentor esto no sucede: se cierra la válvula y el radiador puede repararse o emplazarlo en otro lugar sin que se pierda el agua. Además, al realizar el vaciado y llenado de la instalación puede derivar en futuras averías, ya que la corrosión del agua es mayor de la que había anteriormente debido a las impurezas.
¿Por qué es importante el detentor en el radiador?
Si tu sistema de calefacción es moderno, todos tus radiadores tendrán detentores pero si es antiguo carecerán de ellos, por lo que desde Buenos Días Buenas Noches te recomendamos su instalación, ya que cumplen dos funciones principales.
- Regula el caudal del agua que circula por el radiador. Con este sistema podemos regular la cantidad de calor emitida por cada radiador, en función de la estancia donde esté instalado.
- Permite cerrar la entrada de agua del radiador si se necesita hacer una sustitución o cambiarlo de lugar. Por ello, si quieres que tus radiadores tengan una larga vida, lo mejor es instalar un detentor si carecen de ello.
¿Cómo instalar un detentor?
Aunque no parezca una tarea difícil, la instalación de detentores debe hacerlo un profesional cualificado. Al tratarse de un montaje que afecta al sistema de calefacción central, un técnico especializado ofrece las garantías necesarias de que toda la instalación se realizará de manera correcta, sin dañar el conjunto. Con un experto evitaremos errores que puedan perjudicar al conjunto de vecinos.
Desde Buenos Días Buenas Noches aconsejamos instalar detentores en todos los radiadores de tu hogar. Con ellos, además de controlar el flujo de calor tendrás la posibilidad de cambiarlos de ubicación o repararlos sin ocasionar ninguna molestia a los vecinos. Con una pequeña inversión podrás renovar o reparar tu hogar cómo tú quieras.
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