A la hora de comprar una vivienda siempre tenemos en cuenta el precio, cuánto vamos a pedir al banco de hipoteca, el notario… Además cuando hacemos una visita del que será nuestro hogar en unos días, nos fijamos en su ubicación, su disposición, cuántas habitaciones tiene… Dejamos al margen pequeños aspectos que si no los revisamos nos pueden crear verdaderos quebraderos de cabeza al entrar a vivir. Por eso, a continuación, en Buenos Días Buenas Noches te ofrecemos una serie de aspectos a revisar en una casa antes de comprarla.
¿Cuántas veces te has enamorado de un objeto y después de comprarlo, lo que parecía ideal comienza a dar fallos o inconveniente? Pues con una vivienda sucede lo mismo.
La posibilidad de encontrar fallos y defectos en tu nuevo hogar aumentan gradualmente, según la edad del edificio y las dimensiones de tu casa. Así que si estás buscando piso, no dejes de revisar una serie de puntos para no convertir, lo que era un sueño en pesadilla.
Estado de la vivienda antes de comprarla
Antes de meternos detenidamente en examinar los habitáculos de tu nuevo hogar. Hay que asegurarse del estado de la vivienda y del edificio. Revisa las instalaciones y presta atención al estado de las cañerías, fachada del edificio, canalones… una falta de atención puede originar en un futuro problemas de humedades. Si desconoces todo este mundo, lo mejor es que vayas con un profesional, quien observará todos estos puntos y muchos más con detenimiento.
Eficiencia energética de la vivienda
Hay que asegurarse que nuestra vivienda cuenta con el certificado de eficiencia energética. Es obligatorio en la compraventa de una vivienda y así conoceremos la eficiencia de nuestro hogar. Cuanto más eficiente sea la casa, menos gastos en facturas y más valor tendrá la propiedad. También es conveniente que conozcamos, si el edificio ha pasado la Inspección Técnica de Edificios (ITE) es obligatoria para los inmuebles de más de 20 años de edad y hay que realizarla cada 10 años.
Cuota de la comunidad
Consultar con el administrador o el presidente, los gastos de la comunidad de propietarios. Qué incluye, la cuantía y si el propietario anterior está al día. Además también convendría conocer las obras previstas en la comunidad de vecinos, las que están aprobadas y las futuras, ya que según cuales sean, la derrama será mayor o menor.
Qué examinar en tu domicilio
Una vez analizado el estado del edificio conviene inspeccionar nuestro hogar. Baños, cocinas, habitaciones, instalaciones eléctricas, suelos… son muchos los aspectos a analizar, así que presta atención a nuestros consejos.
Lo más importante: comprueba que las instalaciones de fontanería y electricidad funcionan correctamente, sobre todo si la casa es vieja. Presión de los grifos, estados de las bajantes, enchufes, el cable de la TV… son algunos de los aspectos que pasan desapercibidos y hay que analizar. Si es necesario pregunta a un fontanero o a un electricista.
Lo mismo sucedería con el sistema de climatización. Siempre que puedas enciende la calefacción y si es central pregunta cuándo se hizo el último cambio o revisión.
Tras una revisión general de las instalaciones nos toca analizar los habitáculos. Baños y cocina son los que mayor trabajo dan, así que comprueba que salga agua fría y caliente. En el baño asegúrate de que no hay fugas ni en la bañera, ni en la cisterna, ni en el lavabo. Además analiza que los azulejos estén bien colocados y alicatados.
Por su parte, en la cocina enciende todos los electrodomésticos para comprobar que funcionan y comprueba que todos los compartimentos abren y cierran correctamente. Lo mismo sucedería con puertas y ventanas. Por último, una revisión a los suelos y paredes de tu futura vivienda también es conveniente hacer. Constata que no haya humedades, ni grietas y asegúrate que no hay ninguna baldosa rota o que el parquet está levantado o abombado.
Como ves, antes de comprarte una casa hay que analizar muchas situaciones diferentes, así que si realmente estás interesado en la adquisición de un inmueble analiza todo lo necesario para evitar sorpresas.
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