Estamos a las puertas del invierno momento en el cual el consumo energético se incrementa considerablemente por culpa de la calefacción. Por suerte, existen diferentes herramientas para controlar este gasto siendo la más habitual el termostato. Dentro de sus diferentes tipos, uno de los más demandados son los cronotermostatos. Una opción muy interesante si queremos instalar termostatos nuevos y apostar por un consumo eficiente.
Los cronotermostatos regulan de manera más precisa la temperatura de nuestro hogar comparándolo con los clásicos.
Su empleo es habitual con las calderas de gas, aunque es una herramienta que se puede emplear en otros tipo de calefacción como la eléctrica o la de pellets. Su uso es sencillo, pero si queremos aprovechar sus propiedades al 100%, debemos diferenciar entre la temperatura de inercia y la de confort.
Con el primer término nos referimos a la temperatura mínima que se puede alcanzar en una vivienda. Estos grados se estiman teniendo en cuenta aspectos como el aislamiento de inmueble, el tipo de suelo etc. Por su parte, la temperatura de confort es aquella en la uno se está a gusto en casa, generalmente suelen rondar los 21 grados. Si queremos controlar el gasto energético deberemos poner nuestro termostato a una temperatura que no difiera más de 5 grados entre ambos aspectos.
Un cronotermostato es un mecanismo que controla la temperatura intermedia entre inercia y confort. Vigila que no suba demasiado la temperatura, ni que baje tanto que haga frío en nuestra casa. Gracias a él, no solo podremos ajustar la temperatura, sino que también se puede programar su encendido y apagado a determinadas horas. De esta forma no tenemos que dejar la calefacción puesta todo el día para tener la casa caliente.
¿Cómo funciona un cronotermostato?
El empleo de este tipo de herramienta es bastante sencillo ya que se puede programar su encendido y su apagado. Dependiendo de nuestra forma de vida estableceremos un baremo u otro. Por ejemplo por las mañanas es recomendable encenderlo media hora antes de levantarnos, y por la tarde una hora antes de volver del trabajo. Además tienen la funcionalidad para que en caso de descender o superar una determinada temperatura, el sistema se encienda o se apague.
Según los expertos, este gesto de programar la calefacción puede suponer un ahorro de hasta un 25% en la factura. Un descuento bastante importante si tenemos en cuenta como está la inflación.
Diferencia entre termostato y cronotermostato
La funcionalidad de un termostato y un cronotermostato es la misma; mantener nuestro hogar a una temperatura confortable. Lo que pasa es que el segundo es mucho más preciso que el primero.
Los clásicos sólo sirven para poner la calefacción a una determinada temperatura, mientras que los otros permiten controlarla, y además te dicen la que hay en casa para que actúes en consecuencia. Su objetivo es que funcionen de forma autónoma y no tengamos que manejar ningún tipo de mecanismo.
La opción de instalar un cronotermostato es recomendable sobre todo si nuestro sistema de calefacción está anticuado. De todas formas lo mejor es dejarse asesorar por un técnico en calefacción para optimizar su instalación. En BDBN podemos ayudarte en este tipo de proceso y que reduzcas tu consumo energético sin perder confort en tu hogar.
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